LA
TINTA CHINA FUE LA OTRA SANGRE DE MIS VENAS: MIS RECUERDOS DE DIBUJANTE PERIODÍSTICO
(Para ampliar cualquier imagen pinchar con el mouse o ratón sobre ella)
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Un recuerdo de un pasado hermoso, cuando fui dibujante publicitario en aquella época de mediados de los años 70. Años difíciles y angustiosos aquí en nuestro querido país Chile. Estudiaba por aquel entonces en la prestigiosa casa de estudios superiores, la emblemática Universidad de Chile sede Antofagasta. Paralelamente a mi labor como estudiante universitario tenía que hacer frente al gran desafío que era mi trabajo profesional de Dibujante Publicitario en el Diario El Mercurio de Antofagasta y su cadena de diarios regionales. De aquel entonces he querido extraer y presentar a ustedes esta visión de mi vida, de lindos recuerdos y anécdotas de lo que fue esa singular experiencia en mis juveniles años como diseñador.
Frente al tablero de dibujo: la gloriosa época de diseñador y
bocetista en el Departamento de Publicidad de la empresa Sochipu; editora de
los diarios el Mercurio de Antofagasta, el Mercurio de Calama, la Prensa de
Tocopilla, la Estrella de Norte y la Estrella del Loa. Día tras día debía
lidiar con el trazo de la tinta china y el formato del papel couché o shoeller,
en pos de ir creando diseños y formas para los mensajes comerciales, como
asimismo el humor gráfico. Fotografía tomada por el gran Reportero Gráfico de esta empresa periodística Mario Requena. La imagen del lado derecho, la típica oficina del
Departamento comercial; en primer plano mi colega dibujante Mario Miranda,
mientras Renato Pavéz, agente de ventas, hablaba por teléfono; a la izquierda
se observa al secretario Jorge Guerra mientras yo buscaba en mi bolsillo
izquierdo mi lápiz de grafito para comenzar a trabajar. Año 1978.
El querido y recordado “Yuyo”, como se apodaba artísticamente
nuestro colega y compañero de labores Enrique Pimentel, dibujante del
Departamento Comercial, con quien formábamos el equipo que debía asumir las
tareas y desafíos de los encargos de los anunciantes. Año 1978.
Caricatura de Yuyo, que dibujé en algún momento de relax aquel año
1978, después de una pausa del agitado trabajo de diseño de avisos comerciales.
Mi compañero y colega se caracterizaba por su rica y amena conversación y su
sutil ironía en algunos aspectos que resultaba simpática. Su pelo crespo y cano, sus gafas y su saco de
anchas solapas destacaban su delgada contextura; eran su sello personal. Con
todo respeto lo recordamos.
También no puedo dejar de mencionar al flaquito Mario Miranda, mi
otro compañero dibujante publicitario a quien vemos en la imagen a la izquierda, manipulando
la máquina para armar títulos, que operaba mediante un proceso fotográfico. Con
Mario compartimos agotadoras jornadas de trabajo de trasnoche de ediciones
especiales de suplementos con abundante material publicitario. Año 1978. A la derecha la antigua prensa "Goss", donde me encuentro a la derecha. En esta enorme pero noble maquina se imprimían las ediciones de la diversas publicaciones regionales.
Dos trabajos artísticos publicitarios de Yuyo, para una empresa de
ferrocarriles, el primero publicado el 16 de diciembre de 1977 y el segundo el
10 de agosto de 1978. Nótese el impecable trazo a tinta china de la bella
gráfica de los comerciales, tipo cómics.
Dentro de las tantas ilustraciones que sirvieron de complemento a
notas periodísticas, he aquí esta que se publicó en la página deportiva de la
Estrella del Norte de fecha 17 de noviembre de 1976. Formato dibujo de 7,0
cms. x 3 columnas (12,5 cms.).
TRIFON: Un colega dibujante contemporáneo
TRIFON: Un colega dibujante contemporáneo
Por aquel tiempo en la página editorial de El Mercurio de
Antofagasta aparecía la famosa "Chismonografía", caricaturas que
ilustraba Trifón Jiménez, que firmaba sus dibujos homónimamente como Trifón. El
primer cómic corresponde a la edición del viernes 16 de diciembre de 1977. La
publicación del lado derecho corresponde al 14 de Febrero de 1979. Año del
centenario de la integración de Antofagasta a la soberanía nacional. Además
también dibujaba para el suplemento infantil “Mateito”, de ese mismo periódico.
Dentro de la época tuve la oportunidad de conocerlo y conversar en una
oportunidad al paso en la oficina de publicidad, con quien
intercambiamos algunas opiniones sobre el arte del dibujo. Como persona mayor y
experimentada en los oficios del dibujo, Trifón me dio algunos consejos y me deseó
éxito en este arte.
“MUNDOLOCO” Y “DRAMASHOCK”: MIS
PRIMERAS VIÑETAS Y ESPACIO HUMORISTICO
Era claro mi
interés y motivación por tener ese privilegio de inmortalizar mi trabajo
artístico, de tener un espacio en las páginas del Diario “La Estrella de
Norte”, había que dar credibilidad de un trabajo serio y responsable. Germán
Carmona Mayer, director en aquel momento de ese periódico, creyó en mí y en mis
dibujos y fue así que me otorgó el preciado espacio. De ahí para adelante se escribió una historia
interesante y una experiencia que ha marcado parte de mi vida como Dibujante
periodístico y humorístico y por sobre todo como Diseñador Gráfico. Experiencia
que hasta el día de hoy me ha dejado sabias enseñanzas. Dentro de ese espacio
humorístico, dos secciones de caricaturas se iban alternando semana a semana,
“Mundoloco” y “Dramashock”. Partimos un día 18 de mayo de 1976, con el primer
mono de "Dramashock”. Posteriormente creamos una tira cómica que denominamos
”Micromonos”
“Mundoloco” N° 15, espacio humorístico del Diario La Estrella del Norte. Publicación
correspondiente al día 19 de octubre de 1976. Formato 13 cms. x 3 columnas (12,5 cms.).
“Dramashock” N° 9, publicado en
el Diario La Estrella del Norte el día 21 de agosto de 1976. Formato 14 cms.
x 3 columnas (12,5 cms.).
“Micromonos”, era otro espacio humorístico, una tira cómica
cortita, tal vez un humor gráfico liviano, más visual. El presente cómic fue
publicado el día 31 de octubre de 1977. Formato de 5 cms. x 4 columnas (17 cms.).
Dentro de la colección de monos publicados he seleccionado estas tiras
cómicas, de un humor meramente visual. El primer cómic de arriba fue publicado
en la edición de La Estrella del Norte de fecha 28 de octubre de 1977. En tanto
el cómic inferior corresponde a la edición del diario, de fecha 21 de noviembre
de 1977. Formato de ambas publicaciones de 5 cms. x 4 columnas (17 cms.) cada una.
Estudiar y trabajar, esa era la consigna. Más que la motivación
económica; era más fuerte la necesidad espiritual que implicaba impregnarse de
experiencia y adquirir destrezas profesionales. En la imagen, mi rutina diaria
de ir a estudiar y luego ir a trabajar al diario. Día tras día bajaba esos
peldaños de una pensión ubicada en calle Orchard, por el sector aledaño al
Hospital de Antofagasta. Llevaba mi carpeta con mis cuadernos y además mis
block de dibujos personales, para rayar y tirar trazos hasta extasiarme con
ilusiones, sueños y fantasías a través del lápiz grafito y los plumones de tinta
negra. Luego en algún momento libre después de clases, hacía una pausa o pequeño descanso en algún escaño de alguna
plaza como la imagen de la derecha, que corresponde a la Plaza Sotomayor frente
al mercado de Antofagasta y para variar no podía sustraerme a la idea de dibujar.
LOITO:
EL GRAN ZORRO DE COBRELOA, GANADOR EN LA CANCHA Y EL PAPEL
Por aquel
tiempo, más específicamente por el año 1977, y siempre en mi época de
estudiante universitario; cuando el equipo profesional de fútbol Cobreloa
emergió al fútbol de honor el entusiasmo fue tal, con respecto a apoyar al
naciente club. La comunidad loína y todas las fuerzas vivas de la provincia se
unieron para apoyar al benjamín del fútbol chileno, y no podía ser de otra
manera. Alfredo Lewellyn Bustos, destacado periodista deportivo de nuestra
región, cierto día cuando me encontraba en las oficinas del diario El Mercurio
de Calama, conversó conmigo y me planteó la idea de publicar una monografía de
Loíto, máscota del Club Cobreloa. El compromiso quedó establecido; Alfredo con
sus notas periodísticas y yo con mis dibujos, comenzamos a dar vida al singular
personaje, de acuerdo a la campaña del club, de cada partido semana a semana en
las páginas del Mercurio de Calama.
A la izquierda afiche de Cobreloa de 31 x 41 cms., que circuló por
la provincia El Loa como parte de la campaña para la captación de socios.
Diseño que realicé el año 1977. A la derecha Don Alfredo LLewellyn Bustos,
destacado periodista de nuestra zona con quien trabajamos en la campaña de
apoyo a nuestro querido Club Cobreloa.
Ilustración jocosa de Loíto, inserta en la monografía con ocasión
del encuentro frente a Universidad de Chile. Publicada en el Mercurio de Calama
el 1 de junio de 1979.
Y me despido estimados amigos, espero que les haya gustado esta pequeña pero profunda añoranza de recuerdo de mis diseños gráficos de un pasado que pareciera que fue ayer, pero que sin embargo ya han pasado varias décadas. Cualquier inquietud o comentario lo recibiré con gran entusiasmo. Mi correo por si deseáis comunicarte conmigo: renevasquez01@gmail.com
¡HASTA SIEMPRE AMIGOS!